En esta primera entrada, os dejo unos instantes en la vida del salmón atlántico (salmo salar), especie seriamente amenazada en nuestro país, que sin embargo no goza de protección. La península ibérica fue su refugio durante la última glaciación y ahora son pocos los cauces fluviales que mantienen una población suficiente que garantice su supervivencia.
Esta preciosa hembra que os muestro, después de un viaje épico de miles de kilómetros por el océano, consiguió llegar al lugar de desove, un tramo alto de río en la vertiente atlántica, el mismo en el que nació años atrás. En este fotograma, se ve como realiza la "cama" con la cola, escarbando en el fondo de grava. El macho está detrás de ella, apareciendo por momentos esperando el momento en el que deposite las huevas para posteriormente él fecundarlas con su esperma. Ese acontecimiento ocurrirá durante la noche. También vemos en un primer momento a un joven alevín del año pasado esperando también para darse un banquete con las huevas a la mínima oportunidad que se le presente.
Ahí va también alguna imagen de este maravilloso habitante de nuestras aguas:
Espero que os haya gustado este inicio. Hasta la próxima.
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